EL COLOR (POLÍTICO) DE LA INFRAESTRUCTURA CICLISTA
Fuente: https://www.informacion.es/elche/2023/08/23/confusion-total-eliminacion-carril-bici-91261976.html
Recientemente las personas que se dedican a la movilidad sostenible y al fomento del uso de la bicicleta como medio de transporte en particular, nos hemos quedado con la boca abierta al ver como en varias ciudades del país se quitaba la infraestructura ciclista creada recientemente y que fueron financiados con los fondos europeos “NextGenerationEU”, el plan de recuperación económica después del impacto de la pandemia del COVID-19 1 . Este plan supone una oportunidad única de transformar la economía y las sociedades hacia un modelo más sostenible y resiliente.
Así pues, la creación de infraestructura ciclista era un eje importante de subvenciones para lograr una movilidad más sostenible y mejorar la calidad de aire en las ciudades. Muchos municipios se han beneficiados de estos fondos y han ejecutado muchos nuevos itinerarios ciclistas para fomentar la movilidad en bicicleta.
Pero como suele pasar con este tipo de convocatorias, había prisas en ejecutar las obras para no perder los fondos y se acercaban las elecciones municipales de mayo. Rápidamente las vías ciclistas se convirtieron en arma electoral, sobre todo por parte de los partidos de la extrema derecha, aprovechando la polémica servida por la pérdida de plazas de aparcamiento y carriles de circulación y las quejas de algunos comerciantes (como suele ser habitual cuando se produce un cambio en el reparto del espacio público y cuando la gente debe adaptar sus costumbres).
Rápidamente la eliminación de “carriles-bici” se convirtió en unas de las promesas electorales por parte de Vox y asumidas por parte del PP para conseguir la mayoría necesaria para gobernar en algunas ciudades 2 . Encontrar un pretexto era fácil, se lanzaba el mensaje que las vías ciclistas estaban “mal hechas”, “molestan al tráfico”, “suponen un perjuicio económico para comerciantes” o “eran inseguras&rdquo 3 ;. Una vez en el poder, no perdieron el tiempo y eliminaron algunos de las vías ciclistas de reciente construcción (por ejemplo en Elche, Valladolid, Gijón Logroño y Palma), eso sí, sin percatarse de que posiblemente tengan que devolver las subvenciones recibidas.
La polémica estaba servida y los acontecimientos tuvieron su eco en la prensa y los colectivos ciclistas se lanzaron a la calle para impedir la reconversión de las bandas ciclistas en carriles o aparcamientos para el tráfico motorizado.
Muy interesante es el caso de la ciudad de Elche, ya que ahí los responsables políticos se basan en un informe técnico de la policía municipal para argumentar que los carriles-bici estaban “mal hechos” 4 .
Veamos que decía este informe:
a. Inseguridad vial de vías bidireccionales: Se alega, que el carril-bici bidireccional en la calle José María Buck (calle de un único carril) es inseguro por “no quedar totalmente segregado del resto de la calzada” y en los cruces, porque “los conductores de vehículos a motor deben modificar su foco atencional en sentido opuesto al que naturalmente establece el sentido de circulación”.
Este argumento se puede compartir, hay muchos estudios que ponen en evidencia la peligrosidad de las vías ciclistas bidireccionales en tramos urbanos con muchos cruces e intersecciones. Pero indudablemente también los conductores deben aprender a convivir con la bicicleta y eso supone que tienen que ampliar su foco de atención y conducir con mayor prudencia. Desde luego es casi cínico afirmar que el diseño de la vía “genera estrés perceptivo” de los conductores, me gustaría saber si se analiza de la misma forma el estrés causado por el tráfico motorizado no sólo a ciclistas, sino también a peatones.
b. Peligro por apertura de puertas: Se alega que la ubicación de espacios de estacionamiento en el centro de la calzada junto a los carriles ciclables, como ocurre en un tramo de la Calle José M.ª Buck, representa un peligro potencial al paso de ciclistas por causa de posibles aperturas de puertas de los vehículos estacionados.
Foto: Carril-bici en la calle José M.ª Buck. Fuente: Policía Municipal de Elche
También este argumento es correcto, evidentemente no se ha habilitado un resguardo entre la vía ciclista y la franja de aparcamiento, aparte de que no está resuelto la accesibilidad al vehículo estacionado.
c. Mayor congestión y retenciones: Se alega que generan importantes problemas de tráfico en la Avda. Juan Carlos I a las horas de entrada y salida del colegio Jesuitinas, porque el único carril de circulación restante queda bloqueado conductores en espera de que quede libre una plaza de estacionamiento. Asimismo se cita la pérdida de capacidad en la Avda. de Alicante como un problema.
Indudablemente no se puede diseñar la ciudad para que los coches puedan estacionar en segunda fila o maximizar la capacidad del viario para una demanda en hora punta. Desde luego las retenciones no son un argumento de peso suficiente de quitar un carril-bici contrastándolo con la seguridad vial ganada para los usuarios en bici o patinetes y la reducción de la congestión a medio plazo, cuando se cambian los hábitos de movilidad.
En resumen, es bastante evidente que en el caso de Elche existían deficiencias en el diseño de las vías ciclistas. Los motivos pueden ser varios, las prisas para cumplir con los plazos de las convocatorias de las subvenciones, las limitaciones del presupuesto disponible, la falta de conocimiento y formación del cuerpo técnico o la falta de participación de grupos de usuarios, etc...
Y si los carriles-bici están mal diseñados, mal comunicados o creados sin un consenso básico, es más fácil que se conviertan en el blanco de los partidos de la oposición, de cualquier signo político.
Pero desde luego no podemos pensar que es posible fomentar el uso de la bicicleta sin reducir el espacio dedicado al coche. Primero, porque el espacio en la ciudad es muy limitado y segundo, porque es parte de una estrategia más amplia de fomentar los modos sostenible y disuadir los modos contaminantes.
Por lo cual, ¿que deberían haber hecho los responsables políticos con este informe de la policía en la mano? Pues lo de sentido común: ¡mejorarlos! Seguramente modificando el diseño en algunos tramos y puntos se podría haber mejorado notablemente la seguridad vial y las fricciones con peatones y con el tráfico motorizado.
Pero pintar ciclo-carriles donde antes había bandas exclusivas para la bicicleta (siempre y cuando los criterios técnicos recomiendan la segregación del tráfico motorizado) o intentar trazar las vías ciclistas por zonas donde no afectan al tráfico motorizado (menospreciando el criterio de buscar el recorrido más directo posible), es tirar al niño con el agua sucia de la bañera y volver a cometer los errores del pasado.
Sería ingenuo pensar que el cuidado del medio ambiente y de la salud es una preocupación transversal que cala por igual en los partidos políticos. Los hay que denuncian incluso la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Quizás las ciudades o regiones que han avanzado más hacia la transformación de una sociedad industrial hacía la del conocimiento, el compromiso con la bicicleta sea más transversal, pero este avance no es igual en todas las partes. En las ciudades todavía más ancladas en el imaginario tradicional de la sociedad industrial 5 , la lucha contra el cambio climático y por una movilidad más sostenible, inclusiva e igualitaria tiene un sesgo político determinante.
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[1] https://next-generation-eu.europa.eu/index_es
[2] En otras ciudades, sin embargo, las vías ciclistas se han mantenido a pesar del cambio de gobierno: https://castellonaldia.elmundo.es/castellon/pp-vox-blindan-castellon-carril-bici-revertido-otras-ciudades-LB16716580
https://www.lavanguardia.com/politica/20201223/6144382/vox-consigue-almeida-baje-mas-ibi-e-inicie-carril-bici-castellana.html
[3] https://elpais.com/clima-y-medio-ambiente/2023-06-23/pp-y-vox-eliminan-carriles-bici-en-varias-ciudades-son-tambien-una-cuestion-ideologica.html?event_log=oklogin
[4] https://www.elche.es/wp-content/uploads/2023/08/Informe_vias_ciclables.pdf
[5] https://elpais.com/diario/2002/08/14/universidad/1029350698_850215.html